Descamación en perros y gatos

La presencia de caspa y un aspecto más grasiento de la piel de tu mascota recibe el nombre de seborrea.

Así pues, la caspa y la seborrea en perros y gatos son trastornos cutáneos que se producen cuando hay un defecto de queratinización, que es el proceso por el que la capa externa protectora de la piel se renueva constantemente con nuevas células cutáneas.

Los trastornos de la queratinización se caracterizan por alteraciones de los lípidos superficiales y una producción excesiva de escamas.

Muchas enfermedades pueden asociarse a la descamación y la seborrea, que pueden ser primarias (por ejemplo, en enfermedades genéticas como la ictiosis) o, con mayor frecuencia, secundarias (por ejemplo, en dermatosis alérgicas o hipotiroidismo).

El tratamiento recomendado por tu veterinario dependerá de los síntomas de tu mascota y de la duración del tratamiento. Puede ser un problema muy delicado, que requiere paciencia y perseverancia.

Aunque el reconocimiento y el tratamiento de la causa responsable de la enfermedad son esenciales, la terapia tópica sintomática con formulaciones antiseborreicas siempre es necesaria para rehidratar y reparar la piel descamada de tu mascota y aliviar los síntomas.

Los principios activos necesarios para el tratamiento tópico deben ser sustancias queratolíticas combinadas con humectantes, emolientes y antisépticos.

Es esencial para reparar y restaurar la barrera cutánea dañada.

Los problemas seborreicos en perros se han asociado con una presencia significativamente mayor de levaduras Malassezia en comparación con perros sanos. Se han descrito asociaciones similares en gatos con trastornos seborreicos.

Si existe un sobrecrecimiento de Malassezia, es posible que deba bañar a su mascota con champús especiales y utilizar sprays como complemento del tratamiento.

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